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Abama Blue Ocean, un compromiso con la protección del mar de Tenerife

Enamorados del horizonte que tenemos frente al resort, en Abama hemos querido llegar hasta lo más profundo del mar de Tenerife y descubrir las extraordinarias criaturas que lo habitan. Fruto de ese esfuerzo de divulgación y protección nació el libro Abama Blue Ocean que se ha convertido, además, en una excusa perfecta para hablar con científicos, autoridades y entidades que comparten nuestra misma preocupación.

En un encuentro sin precedentes, Abama reunió a grandes personalidades como Max Bello, representante de Mission Blue, entidad que estudia convertir la Franja Marina Teno-Rasca en una zona protegida; Ana Dorta, Alcaldesa de Guía de Isora, quien anunció la creación de un centro de interpretación marina, y Rosa Dávila, Presidenta del Cabildo de Tenerife,  que promoverá una colaboración más estrecha entre el ente público y la empresa privada. 

A continuación, compartimos algunos de los momentos más destacados de los diálogos que Elodie Casolà, nuestra directora de marketing y comunicación mantuvo con cada uno de ellos. 

Max Bello, Director de Políticas Públicas de Mission Blue

Max Bello, para mí eres como el guardián de los océanos, pero cuéntanos quién eres y por qué el mundo de los océanos es tan importante.

Soy el director de Políticas Públicas de la organización Mission Blue, alianza liderada por Sylvia Earle. Desde ahí trabajo con muchas otras organizaciones y en muchos países para la protección del los mares. Me he enfocado, sobre todo, en la creación de espacios protegidos porque el océano es el que ha generado las condiciones que nos permiten vivir como humanidad hoy en día. No hay otro lugar conocido hasta el momento que tenga un océano como el que tenemos en la Tierra.

Entiendo que es tu primera vez en Canarias, primera en Tenerife y primera en la Franja Teno-Rasca. Cuéntanos por qué has venido y qué te has encontrado en este viaje. 

Mission Blue establece ‘Hope Spots’ o ‘Lugares de Esperanza’ entre aquellas áreas marinas que requieren una protección especial. Estos espacios se detectan a partir de la relación con los conocedores de la zona como, en este caso, Francis Pérez, fotógrafo de gran prestigio y uno de nuestros Champions. La visita nos permite ver cuáles son las posibilidades de creación de un espacio protegido y esta Franja no solo es importante para el Atlántico sino también a nivel global. Hoy escuchábamos a un científico decir que este es el lugar más grande conocido en el mundo en el que vive una población estable de calderones, y eso tiene un significado. ¿Por qué están ahí? ¿Cuáles son las condiciones que motivan a estos animales que, por cierto, son grandes depredadores? 

Vengo acá porque creo que Canarias es un lugar que necesita y merece mayor protección y cada vez hay más conciencia sobre ello. Hay montones de organizaciones locales y nacionales que están trabajando en la región y es probable que nosotros podamos jugar algún rol para apoyar este proceso. 

Tuve la oportunidad de ir al agua y fue un momento realmente increíble. Cuando llamé a mi esposa para contárselo, le decía que había sido una experiencia sin parangón en términos de la conexión que se generó con los calderones en su hábitat. 

Eso te muestra también lo poco sabemos sobre el océano. En muchos lugares tendemos a estrechar relaciones con animales terrestres, pero parece que establecemos distancia con los del océano cuando también son vida salvaje. 

Después de tantos años trabajando con organismos internacionales, multilaterales y gobiernos, ¿qué consejo darías a este destino, a las autoridades locales? 

Yo creo que lo principal es que cuando la gente tiene algo que ama - su familia, por ejemplo - y ve que hay alguna amenaza, va a hacer lo que sea por protegerla. Pues el mar y esos animales son parte de nuestra familia. Lo primero que tiene que pasar es que no podemos esperar a que alguien de fuera venga a hacer lo que nosotros podemos. De alguna forma ya he visto la activación de la sociedad civil en Canarias sobre temas que les preocupan y creo que es súper bonito que, efectivamente, eso nazca desde la sociedad canaria, que defiendan y protejan lo que es suyo. 

Me ha gustado una declaración tuya sobre unas palabras de Sylvia Earle en el sentido de que “no podemos hacer todo, pero todos podemos hacer algo”.

Exactamente. Uno tiende a pensar en término de superhéroes que alguien de fuera va a llegar a solucionarnos la vida. Pero la verdad es que nosotros mismos tenemos el poder para tomar las decisiones correctas. 

Ana Dorta, Alcaldesa de Guía de Isora

Desde vuestro punto de vista, ¿dónde veis que se puede seguir mejorando y protegiendo la Franja y los animales que viven allí? Y dinos un poco qué proyectos tenéis. 

Tenemos un tesoro en la zona de Guía de Isora y queremos que las ballenas sean un símbolo de identidad del municipio. Por eso hemos participado activamente en la publicación del libro y vamos a seguir participando para dar a conocer más esta zona tan emblemática, centro de llegada y de ilusiones. Adentrarse en los fondos marinos de esta zona costera de Guía de Isora es entrar en un mundo mágico. 

Ya no solo somos nosotros los que queremos esta zona sino que viene gente de fuera para ratificar el valor de lo que tenemos aquí. ¿Qué más podemos hacer desde el sector privado y el sector público para ayudar en esta dirección?

La colaboración y el convencimiento de que lo que vamos a explorar es bueno para todos, representa el amor por nuestro entorno -sin perder nuestra identidad- y es algo positivo para las nuevas generaciones. Ya hay una concienciación de que contamos con lugares que son únicos en el mundo y tenemos que ser primero los locales, las personas de Guía de Isora las que los protejamos. También hay que extender esta conciencia a la gente que concibe este municipio como su centro de trabajo, de encuentro familiar, de encuentro social y, en definitiva, el centro de mayor enriquecimiento cultural y medioambiental. 

La colaboración es imprescindible y cuando lo hacemos de la mano de expertos, lo tenemos todo. Eso es lo que yo quiero para esta zona y lo que queremos todos los Isoranos y el grupo de gobierno que tengo el privilegio de presidir. 

Estamos cociendo un proyecto maravilloso, un centro de interpretación marina. Queremos educar a los más chiquititos, las más chiquititas, pero también dar a conocer ese rincón mágico que incluye toda esta zona. Y creemos que dentro de ese gran proyecto, un centro de interpretación marina es el instrumento más apropiado para dar a conocerlo. 

¿Alguna pista de dónde o para cuándo el proyecto? 

Bueno, estamos valorando que sea el lugar idóneo, porque para poder enseñar y mostrar esta riqueza tiene que ser un sitio muy específico. Estamos evaluando la posibilidad de que sea en Alcalá. Todo va por periodos. Hay un proyecto súper bonito que hemos adoptado decididamente desde la Concejalía de Turismo, de Desarrollo Local y desde la propia Alcaldía. 

Para mí es fundamental que no perdamos la identidad del lugar donde se vaya a ubicar este centro de interpretación, que los vecinos de Guía de Isora se sientan partícipes también. Porque si eres partícipe de algo importante, tú lo cuidas, lo mimas, lo proteges y lo difundes con cariño. Entonces hay un proyecto muy bonito que creo que va a ser aceptado por todos y donde vamos a involurar a toda la comunidad con una parte educativa. Lamentablemente muchas veces caemos en el error de explorar lugares más lejanos e ignorar la belleza que tenemos más próxima a nosotros. 

Rosa Dávila, Presidenta del Cabildo de Tenerife

Sé que tú eres una enamorada de los océanos, ya no solo en tu labor profesional, si no también en tu vida personal. Cuéntanos un poco cuál es tu experiencia y por qué este amor, de dónde surgió. 

Creo que como tantos isleños, soy de vivir ensalitrada dentro del mar. A raíz de ese interés de salir a nadar al mar en aguas abiertas descubrí, al llegar al Cabildo, a personas tan extraordinarias como Pedro Millán - director de Medio Natural - y Felipe Ravina, documentalista. Felipe me llevó a bucear, primero haciendo snorkel, a ver las tortugas. Después me metí con botella y descubrí las maravillas que hay aquí mismo, en este lugar, esta reserva marina extraordinaria en este punto del Atlántico donde hay probablemente una de las mayores biodiversidades que merecen ser cuidadas, preservadas. De toda esa experiencia surge la iniciativa de que el Cabildo, que es el gobierno de la isla, no termine solo en la franja costera, sino que vaya un poquito más allá y se meta mar adentro. También por eso la decisión de suscribir la alianza de los océanos de Naciones Unidas. 

¿Crees que aquí el tema de la comunicación va a ser importante para que, como hemos oído en el coloquio, los canarios sientan que esto es su ADN? ¿Que realmente parte de su cultura, de su raíz, viene del océano y desde allí el interés por proteger su riqueza?

Fíjate que han sido dos de las palabras que más se han repetido en el coloquio, las de conocimiento y comunicación. El de involucrar a toda la comunidad, el que todo el mundo se sienta interpelado y sea parte de nuestra identidad. Y para eso tenemos que divulgarlo bien. Hemos visto que Abama ha decidido hacerlo a través de un libro maravilloso, pero hay otros canales, como el de Felipe Ravina a través de sus documentales o las redes sociales, fundamentales para que todo el mundo conozca las maravillas de este canal que hay entre Tenerife y La Gomera, el único santuario de ballenas de Europa y el tercero más importante del mundo. 

Toda esta información a veces es desconocida para los propios canarios. Creo que muy poca gente sabe que aquí tenemos la población residente de cetáceos más importantes del mundo, con lo cual las palabras difusión, comunicación y sobre todo, el hecho de involucrar a la comunidad en ese conocimiento es importante para que después se sientan parte del privilegio de poderlo preservar y conservar. 

¿Y qué podemos hacer las empresas privadas para seguir ayudando a comunicar, a promocionar esta riqueza? ¿Puede haber algún tipo de colaboración público-privada? 

Es esencial. Me parece fundamental, primero, la toma de conciencia y sobre todo la de las empresas que están localizadas en un territorio frágil, único, donde es un lujo poder trabajar. Desde esa toma de conciencia es desde donde nacerá el impulso de involucrarse directamente en esa colaboración. Y a partir de ahí, cada agente económico y social es un elemento fundamental de transformación hacia un proceso de conservación mucho más activo. Y ahí es donde nacen los proyectos público-privados. Me parece que además hay mucho que podemos hacer entre las empresas privadas y las autoridades. 

El océano nos une y creo que esa alianza mundial nos permite actuar desde lo local pero sabiendo que también hay una gran hermandad que hemos montado con Max Bello y con gente de todo el mundo que hace un trabajo científico y de divulgación muy importante. También el trabajo que hacen ustedes desde Abama siendo parte activa de la preservación y la conservación.