Modelada por siglos de fuego, viento y silencio, la orografía canaria ofrece a propios y visitantes el regalo de los contrastes. Un prodigio que la arquitectura de Abama Resort ha sabido modelar con cuidado. Laderas escarpadas, barrancos que descienden hacia el mar, allá donde la mano del hombre intenta domar a la naturaleza con agriculturas fecundas e imposibles. Un paisaje agreste, y al tiempo apasionado, donde cualquier arquitecto se enfrenta a un reto extraordinario: dialogar con la naturaleza sin imponerse a ella. Las 160 hectáreas de Abama Resort se integran en este escenario con la dulzura de quien espera a ser invitado. No en vano, desde su inauguración en 2010, cada metro cuadrado de sus instalaciones ha sido estratégicamente pensado para no quebrar el equilibrio de este oasis entre el azul del Atlántico y el perfil volcánico del Teide.
Melvin Villarroel: el origen de una visión
El legado de Melvin Villarroel, autor de la idea inicial de Abama Resort, y autor de la arquitectura del hotel Ritz Carlton, Abama Tenerife y de Las Terrazas de Abama Suite sigue vivo en la filosofía que guía su desarrollo actual. Su planteamiento partía de una premisa clara: la arquitectura debía integrarse en el paisaje, no competir con él. Esa visión fundacional —la del arquitecto que ve la naturaleza como parte esencial de la obra— ha impregnado cada nueva etapa, inspirando a los estudios que han seguido su camino.
Coderch Urbanismo y Arquitectura tras las suites Abama
El estudio Coderch Urbanismo y Arquitectura, en manos de Jorge Coderch Figueroa, Juan Lima Coderch and Alejandro Afonso Coderch, ha sido una pieza clave en el desarrollo de Abama Resort. Responsables de proyectos como Las Terrazas de Abama Suites y Los Jardines de Abama Suites, su enfoque combina la elegancia mediterránea con la sensibilidad hacia el paisaje volcánico. Una combinación que marcará el futuro del resort gracias al papel que este estudio seguirá manteniendo en los próximos desarrollos previstos para 2026. Sus edificaciones se abren al horizonte con grandes ventanales y terrazas escalonadas que siguen la pendiente natural del terreno. En sus manos, la arquitectura se adapta a la topografía sin renunciar al confort, logrando una conexión visual y emocional con el entorno que se percibe en cada rincón. Con su particular destreza, este estudio sabe firmar proyectos donde los usos mixtos, como el residencial y el turístico, conviven sin fricciones.
Corona-Amaral Arquitectura, geometrías urbanas
El estudio Corona-Amaral Arquitectura aporta una visión contemporánea que abraza la geometría y la pureza formal. En Las Atalayas de Abama, su trabajo parte de la topografía inclinada del terreno para crear viviendas que parecen flotar sobre el paisaje. El uso de materiales naturales, como la piedra volcánica y la madera, y el juego entre sombra y luz, generan una arquitectura que se integra con discreción, potenciando la calma y la intimidad. Su propuesta conjuga la sofisticación del diseño con la humildad del contexto insular.
Virgilio Gutiérrez Herreros y Eustaquio Martínez, villas deliciosas
El tándem formado por Virgilio Gutiérrez Herreros y Eustaquio Martínez ha firmado proyectos emblemáticos como Bellevue –galardonadas con el reconocimiento de Las mejores casas de nueva construcción de la década” según la Asociación de Arquitectos de Tenerife – y las mansiones de uso turístico Las Villas del Tenis, donde la elegancia se combina con una clara intención de arraigo. Su lenguaje arquitectónico apuesta por la horizontalidad, los espacios abiertos y la fusión entre interior y exterior. Cada estancia se orienta hacia el Atlántico, con vistas que actúan como extensión natural del espacio habitable. Su obra encarna la serenidad del paisaje de Abama y la luz cambiante que lo define.
Leonardo Omar Arquitectos
Dos de las Custom Villas más emblemáticas de Abama llevan el sello de este estudio fundado de Santa Cruz de Tenerife. Consolidado como una referencia en el ámbito de la arquitectura contemporánea de las Islas Canarias, su equipo multidisciplinar trabaja con una visión integral que abarca desde el diseño y la construcción hasta el interiorismo. La sostenibilidad es el punto de partida de cada proyecto, concebido siempre en equilibrio con el entorno y con las necesidades del cliente final.
EVMred Arquitectos
También al frente de alguna de las villas más carismáticas, este estudio tiene la intención de recuperar el lado humano de la arquitectura. Frente a una época en la que el mercado y la técnica parecían haber eclipsado la emoción, EVMred apostó por reconciliar la razón con el corazón, entendiendo que los edificios solo cobran sentido cuando reflejan las necesidades, aspiraciones y emociones de las personas que los habitan. Su filosofía se basa en la comunicación, la empatía y la humildad como pilares de un proceso creativo en el que cada cliente forma parte activa del diseño.
La arquitectura de Abama Resort no busca imponerse: escucha. Escucha el sonido del océano, la inclinación de las colinas, el ritmo del sol sobre la piedra volcánica. Y, a partir de esa escucha, se despliega en formas que celebran el equilibrio entre el hombre y la naturaleza. Los estudios al frente de Abama contribuyen todos en una misma narrativa: la de un resort que se construye a partir del respeto y la armonía con el entorno. Gracias al talento de sus arquitectos, la arquitectura tras Abama se ha convertido hoy en unos de sus reclamos y también en su futuro más próximo. Muy pronto, podemos adelantarte, volverá a ponerse al frente con el horizonte de los nuevos desarrollos previstos para 2026.